ND
Junio 28, 2010
Desde hace años se veía venir, experiencias del pasado en otros países y las acciones del gobierno de Hugo Chávez, mostraban las intenciones del régimen: Todos los caminos conducen al comunismo. Su estilo personalista y su afán de ser el líder único; su desconocimiento y la cero atención hacia los venezolanos que no acompañan su proyecto político; su política internacional y militar; su constituyente y la eliminación de la democracia representativa en nuestra constitución; su discurso guerrerista; sus discursos a favor de otros regímenes totalitarios; su proyecto de reforma constitucional y el poco interés en invertir en el área de servicios básicos para mejorar la calidad de vida de los venezolanos, enseñan cual es la verdadera orientación ideológica de un régimen que trata de moverse, disimulando y para ganar tiempo, entre la democracia y la dictadura.
El comunismo ya está a la vuelta de la esquina.
Ofrecernos democracia y participación política ha sido su más eficaz carnada y todos hemos mordido el anzuelo. Ofrecer esperanzas y oportunidades de gobierno a los venezolanos, le ha dado tiempo suficiente para imponer su proyecto ideológico y político. Las reiteradas elecciones le han servido para maquillar la verdadera naturaleza de su régimen y como ahora controla casi la totalidad de los medios de comunicación, desarrolla una férrea campaña de adoctrinamiento y desinformación hacia el pueblo venezolano.
El gobierno nacional ya no es solo el problema; con la desesperación de la gente por sobrevivir, el régimen avanza por un camino despejado hacia la destrucción de las bases del sistema democrático existente, mientras construye las bases de un sistema autoritario, totalitario y comunista. El estado totalitario se consolidad al mismo tiempo que los venezolanos se ocupan en sobrevivir y por eso debemos ocuparnos, como prioridad, en salir de este gobierno y demoler las bases del estado totalitario que crece en Venezuela.
El comunismo ya está a la vuelta de la esquina, por eso cuidar la unidad democrática debe ser un esfuerzo consciente y responsable de todos. La política de la alternativa democrática deber ser seria y no frívola; estratégica y no solo electoralista; de entrega, de sacrificio y de mucho amor por Venezuela.
El comunismo promete un mundo y un hombre nuevo en el futuro a partir del sacrificio del hombre de hoy. El comunismo promete una utopía irrealizable e imposible que sacrifica vidas humanas por nada y solo beneficia al régimen que lo impulsa.
Nuestro país no lo merece.
Unidad! El comunismo ya está a la vuelta de la esquina!
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